Shoshana Ovitz, sobreviviente del Holocausto, cumplió 104 años y le pidió a sus familiares un regalo muy especial: que todos sus descendientes la acompañen a rezar en el Muro de los Lamentos.
La periodista israelí Sivan Rahav Meir publicó en su página de Facebook el testimonio de Meir, nieto de Shoshana: “Mi abuela sobrevivió Auschwitz. Frente a sus ojos el Dr. Mengele le arrebató a su madre. Después de la guerra se encontró con nuestro abuelo Dov que había perdido en los campos (de concentración) a su esposa y cuatro hijas”.
“Ellos se casaron y emigraron a Haifa. Trabajó como costurera y lo ayudaba a manejar su tienda de pollos. Ahora la abuela cumplió 104 y pidió un regalo: que todos sus descendientes vengan juntos al Muro de los Lamentos”.
Aunque no hay un número exacto, una de las nietas explicó al portal israelí Walla que estiman que Shoshana tiene alrededor de 400 nietos.
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