
El Proyecto Ahavat Shalom comenzó a funcionar finalizando el año 2013. Su singularidad es el trabajo compartido que se desarrolla entre el Rabinato y el departamento de Programas Sociales para la atención de situaciones familiares, de pareja o individuales.
Con los aportes de las diversas miradas provenientes de la Halajá (Rabinato) y el área social se interviene de manera conjunta brindando asesoramiento básicamente en los siguientes escenarios:
– Violencia de género: La ley 26.485 conceptualiza a la violencia como “toda conducta, acción u omisión que de manera directa o indirecta, tanto en el ámbito público como en el privado, basada en una relación desigual de poder, afecte su vida, libertad, dignidad, integridad física, psicológica, sexual, económica o patrimonial, así como también su seguridad personal”. Se trabaja dichas situaciones apelando a diversos recursos que se entrecruzan: orientación legal, asistencia psicológica, recursos económicos y orientación y contención profesional)
– Resistencia de algunos de los miembros de la pareja a otorgar el divorcio religioso debido a las profundas consecuencias que implica.: se intenta trabajar para arribar a acuerdos que resulten favorables para ambos
– Separaciones de hecho: Orientación y acompañamiento. Se intenta trabajar concientizando acerca de las implicancias de una separación conflictiva y agresiva y promoviendo a que la misma no se convierta en una confrontación permanente, en búsqueda de acuerdos que beneficien a todos los miembros, principalmente a los niños.
– Incumplimiento de la cuota alimentaria: Orientación legal e intervención social en casos de carencia socioeconómica.
– Régimen de comunicación: su finalidad es fomentar y favorecer las relaciones entre los seres humanos, de manera que no se agrave para los protagonistas del conflicto (en particular los hijos menores de edad) las secuelas de las separaciones y de los quiebres de las convivencias entre los adultos. Se parte del criterio esencial de que el niño es sujeto y no objeto de las controversias que se desaten entre los adultos. Se busca con ello que no se frustre el enriquecimiento espiritual y afectivo del niño
– Personas con redes sociales y familiares debilitadas: Las redes sociales son un poderoso agente de bienestar y salud de las personas. Es por ello que se trabaja sobre el fortalecimiento de las mismas y sino las hubiere sobre la construcción de nuevos vínculos.
– Personas con padecimientos de salud mental, Orientación y acompañamiento. Acceso a la salud. Opciones sobre tratamientos, Orientación laboral. Fortalecimiento de redes sociales de contención.
– Integraciones de niños en red escolar judía
El programa Ahavat Shalom incluye dispositivos de acompañamiento y orientación social, terapéutica y legal teniendo como base la halajá en el marco de los derechos sociales. De esta manera se intenta respetar la identidad religiosa y la integridad física, psíquica, moral.y social.
Por último es importante agregar que se está armando un proyecto para aplicar en diferentes ámbitos, con el fin de generar consciencia acerca de la importancia de los vínculos saludables y la detección de vínculos nocivos que pueden desencadenarse en violentos.