El 13 de junio de 2006 AMIA abría oficialmente las puertas de su Centro Integral de Adultos Mayores “Jofesh”, e inauguraba así su nueva sede de la calle Uriburu 650.  Ponía en marcha, de este modo, un ambicioso e innovador proyecto para mejorar la atención de un considerable número de adultos mayores, quienes -a través una gestión profesional- comenzaron a tener a su disposición, en un mismo lugar, una amplia variedad de propuestas recreativas, culturales y terapéuticas, además de servicios sociales y de salud de calidad.

El edificio de la calle Uriburu es hoy sede también de las áreas de Servicio Social, Infancia, Discapacidad, Voluntariado, y de la Oficina Central del Servicio de Empleo de AMIA. En el lugar, que esta semana cumple sus primeros doce años, trabaja un equipo integrado por trabajadores sociales, psicólogos, enfermeras, gerontólogos, terapistas ocupacionales, profesores, personal administrativo y de maestranza que, día a día, colaboran entre todos para poner en acción cada uno de los derechos sociales que la institución tiene como misión garantizar.

El Centro Integral de Adultos Mayores de AMIA (CIAM) recibe a más de 500 personas por semana. Apoyado en una sólida estructura profesional e interdisciplinaria con formación gerontológica, el CIAM es hoy una referencia en la región en términos de atención integral y profesional a la también llamada “cuarta edad” y el mejoramiento de su calidad de vida.

Desde el área de Adultos Mayores de AMIA, que depende del Departamento de Programas Sociales, destacaron principalmente los beneficios que presenta el funcionamiento de un Centro de Día apoyado en un modelo de funcionamiento, que cuenta con supervisión permanente. Entre ellos: el mantenimiento del nivel de autonomía de los adultos mayores, la prevención de la institucionalización, el apoyo social y asistencial a las familias, el fomento de la socialización y la participación, y el hecho de compartir un espacio activo con sus pares.